En 3, 2, 1… Ayuso asesina

Eso es lo que va a ocurrir dentro de nada. Lo sabemos todos. En cuanto empiecen los telediarios, los titulares, los opinólogos de la progresía y los tertulianos de nómina de la izquierda, el guion será el de siempre: la culpa es de Ayuso. No del derrumbe, no de un error técnico, no de un fallo estructural, no de un fatal accidente. No. La culpa será, una vez más, de Ayuso.

Y saldrán los sindicatos, esos que desaparecen cuando hay que defender a un trabajador de verdad, pero que resurgen como buitres en cuanto hay una desgracia que puedan utilizar políticamente. Dirán que es la legislación de la Comunidad de Madrid, que las inspecciones, que los permisos, que la liberalización. El argumentario de manual. El mismo que llevan recitando años cada vez que algo pasa en Madrid y gobierna el PP.

Pero, curiosamente, cuando ocurre una tragedia en Asturias, cuando mueren mineros, entonces es un “trágico accidente”. Entonces no hay culpables, ni responsables políticos, ni tertulianos buscando sangre. No hay ministros señalando. No hay portadas culpando al presidente del Principado. Porque allí gobierna el PSOE. Y cuando gobierna la izquierda, las muertes son “fatalidades”; cuando gobierna Ayuso, son “asesinatos”.

Esa es la miseria moral en la que vivimos. Un país en el que una tragedia humana se convierte en un arma política, donde el dolor ajeno se manipula para atacar al adversario. Y todo con la complicidad de unos medios que ya ni disimulan su sesgo, y de unos sindicatos que han cambiado la defensa del trabajador por la defensa del Gobierno.

Lo ocurrido en Madrid ha sido un accidente, punto. Trágico, doloroso, pero accidente. Y quien intente convertirlo en una cacería política demuestra exactamente lo que es: un carroñero ideológico.

Y sí, en 3, 2, 1… ya estarán redactando el titular: “Ayuso asesina”. Porque en España ya no hace falta investigar para juzgar. Basta con que gobiernes en Madrid y no seas de los suyos.

Miguel Ángel Arranz